Por PEDRO DIAZ ROJAS – La Serena (Chile)
"En tiempos de
elecciones las amplias sonrisas y abrazos palmoteados son repetitivos; pero de
las deudas que afligen a nuestro Chile, no hay recuerdos."
Es común ver, ante
las cámaras de TV, como se repiten los abrazos entre los mismos personajes de
la derecha reaccionaria, con amplias sonrisas de oreja a oreja; pero, estamos
ciertos, que pasado el mes de Noviembre los rostros volverán a mostrarse
compungidos, y como dice el refrán:"si te visto no me acuerdo", pero
de los negocios, si.
Estos mismos
candidatos, que hasta ayer se denostaban, hoy se palmotean fuerte, y no
cabe dudas, que al volver a sus hogares las "friegas" con alguna
pomada serán recurrentes para aminorar los dolores de espalda, y más de alguno
quedará internado en una clínica o en el "open door". Así es, y ha
sido siempre, y poco o nada interesa que los grandes temas que preocupan a la
población no afloren quedando como deudas que no se saldan pero que volverán a
ser promesas en las próximas elecciones.
La juventud, los trabajadores y las dueñas de casa lo saben
muy bien, y es por eso que en la hora presente se muestran incrédulos ante los
ofertones de un sector, razón por la cual, de los 13 millones de inscritos en
los registros electorales sólo sufragaron 5 millones el año recién pasado.
Mientras tanto, la calidad y la gratuidad de la educación y
la salud, el mejoramiento de los sueldos y jubilaciones, una efectiva reforma
laboral, el óptimo cuidado del medio ambiente, el fin al sistema electoral
binominal, la recuperación de las riquezas naturales, y lo más trascendente: el
cambio a la constitución de 1980, quedan disimulados por las sonrisas, los
abrazos y palmoteos.
PEDRO DÍAZ ROJAS
LA SERENA
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por su comentario