SOMOS FELICES, FELICES…

Escribe Luis Casado – 28/09/2010


Si no fuese chileno me gustaría serlo para sacarle pica a los países atorrantes, picantes, rascas, vagabundos, miserables, pinganillas, pinches países en vías de subdesarrollo, pijoteras naciones que no tienen ni el liderazgo ni la competencia del nuestro.

No porque los astilleros de la Armada fabricasen tres cilindros metálicos para sacar a los mineros enterrados vivos, -proeza tecnológica digna de Guiness o de “Increíble pero cierto”-, sino porque según Jeffrey Sachs, -un experto tarifado-, el ghetto de flores bordado, “será uno de los países que va a entregar la forma de cómo terminar con la extrema pobreza…”. Así como lo lees.

No sé si vamos a cobrar por enseñarle a los demás cómo deshacerse los picantes pero hay ahí una excelente “oportunidad de negocio”. Y muchos clientes.

Francia por ejemplo, en donde según el Insee, -Instituto Nacional de Estadísticas-, los flaites representan el 13% de la población. La cosa no es peor en razón de las asignaciones familiares que contribuyen a paliar la miseria. En el 2008 el umbral de pobreza se situaba en 949 Euros, suma equivalente al 60% de la mediana del ingreso. La mediana del ingreso divide la población en dos mitades. Un 50% de la población gana más, la otra mitad gana menos. Lo que quiere decir que la mitad de los franceses dispone de solo 19 mil euros anuales para sobrevivir en ese valle de lágrimas. Si hiciéramos el mismo tipo de cálculo en Chile, el umbral de pobreza se situaría en 200 mil pesos mensuales por atorrante. Pero eso es lo que hay que enseñarle a los franceses: que no sean boludos y modifiquen sus pinches definiciones estadísticas. De otro modo van derechito a la catástrofe.

Otro cliente serio son los EEUU, en donde el número de pobres aumentó por tercer año consecutivo en el 2009, alcanzando la coqueta cifra de 44 millones atorrantes. Un record en los últimos 51 años. No lo digo yo, lo dice el United States Census Bureau, el INE de los yanquis. La tasa de pobreza era de un 14,3% en el 2009, contra un 13,2% en el 2008. ¡Este es crecimiento mi alma! Cuatro millones de pobres suplementarios en un año, ¡hazme esa! Paralelamente el número de amerloks sin seguro médico aumentó a 51 millones en el 2009 contra “sólo” 46,3 millones en el 2008. “Es la cifra más alta desde 1987, año en el que comenzamos a colectar estos datos” dice David Johnson, un tigre que labura en el United States Census Bureau.

Otro serio candidato a cliente es España que goza, -si oso escribir-, de una tasa de desempleo superior al 20%. Y habría que ir rapidito a desfacer ese entuerto, antes que los sindicatos españoles UGT y CCOO no terminen de abollar el gobierno del “progresista” Rodríguez Zapatero. Para no hablar de la juventud española que comienza seriamente a soplarle en los bronquios a un Estado que se olvidó de ellos. No como en Chile en donde los jóvenes son los regalones.

Como ves, hay pega. Michelle Bachelet pierde su tiempo en la ONU. Para mí que debía armar un equipo con Nicolás Eyzaguirre, Andrés Velasco y Felipe Larraín y crear una consultora en Washington. Con estos patriotas asesorando el United States Census Bureau, el United States Departement of Labor, la FED y el Treasury Department… podrían hacer desaparecer la pobreza en menos tiempo del que tardo en escribirlo. Y ganar una pasta gansa.

Lástima que sean tan adeptos del servicio público y del sacrificio personal: de otro modo podrían contribuir poderosamente a que otros países fuesen como nosotros: felices, felices…